Hablar del Alzheimer y no hablar del “sundowning” o Síndrome del Ocaso (también conocido como Síndrome del Atardecer), es como no hablar. 😒
Sundowning o síndrome del ocaso y el Alzheimer
Tal y como el nombre lo indica el Sundowning o Síndrome del Ocaso se presenta en las horas de la tarde, al caer el sol. Al atardecer los pacientes con demencia se muestran agitados, ansiosos y su conducta empeora. ¿De que se trata este síndrome?
El paciente con Alzheimer muestra una alteración en el ritmo circadiano, (los cambios físicos, mentales y de conducta que siguen el ciclo de 24 horas del día, son procesos que responden a la luz y la oscuridad) lo que provoca que el paciente presente un ciclo alterado en el que duerme de día y está despierto, alerta y activo durante la noche.
Un ejemplo de las conductas de un paciente de Alzheimer con sundowning o síndrome del Ocaso
- En la mañana
- Con sueño, aletargado, desganado
- desinteresado en interacción familiar o conversación
- En la tarde
- más tranquilo y responsivo
- En la noche
- conversador, alerta, activo
- despierto, inquieto, ansioso, agitado
Es posible que si tu ser querido vive solo, estas conductas pasen desapercibidas, en el caso de mi papá, la bandera roja 🚩 se empezó a levantar durante el “lockdown del 2020”.
Al no poder visitar a papi (por aquello de no ponerlo en riesgo pues todavía no había vacunas, ni muchas alternativas de tratamiento contra el virus) nos daba trabajo que nos contestara el teléfono y cuando finalmente lo cogía, parecía no darse cuenta de la hora, si era de día o de noche.
Si nos contestaba en las tardes, nos decía que se acababa de despertar y muchas veces despertaba cuando mi hermana llegaba a chequearlo a su casa, luego de ella salir del trabajo a 6 de la tarde. Nos dimos cuenta de que pasaba todo el día durmiendo…
Entonces, una noche a las 12:24am, recibí una llamada de papi a mi celular, asustada contesté y le pregunto: “Papi, te pasó algo? Estás bien?“
(¡Imagínate! A esa hora, ¿qué uno va a pensar?) 🤷
Él me contesta: “No, no estoy bien, me han dejado aquí solo en esta casa que yo no conozco, todo está oscuro y no puedo salir de aquí”… Yo, más confundida que él le digo: “Pero asómate por la ventana y dime lo que ves”
Él me dice: “No veo nada, está oscuro, no encuentro la puerta para salir, no puedo prender las luces, no sé que hacer”
Le dije: “No salgas de ahí, busca donde puedas sentarte y espera, dame unos minutos y te llamo ya mismo a ver que hacemos”
Yo vivo a 45 minutos de él, así que traté de conseguir a mi hermana que vive a 10 minutos de él y no me contestó el teléfono 😠 decido prepararme para salir y mientras estoy hablando con mi esposo me suena el teléfono nuevamente y es papi.
Papi: “mira nena, todo está bien, es que una de ustedes me dijo que no dejara el celular lejos y cuando fui al baño me di cuenta de que el celular estaba en el otro cuarto, lo fui a buscar y me acosté en la cama de ese cuarto, me quedé dormido y al despertar pensaba que estaba en el primer cuarto, por eso me confundí”
Conociendo la orientación y ubicación de los dos cuartos, su explicación me resultó lógica (y él fue muy convincente) así que nos dimos las buenas noches y nos despedimos.
De todos modos a la mañana siguiente aparecí en su casa, lo encontré muy contento sentado en el balcón y le pregunté acerca de lo que había pasado la noche anterior y el NO tenía recuerdo de haberme llamado, ni de que hubiera pasado nada de lo que pasó. 😕
Hablo con mi hermana, le cuento lo que había pasado y ella me dice, que la noche anterior se había ido la luz en todo ese sector y que posiblemente al no poder prender las luces, papi se había “desorientado”.
Pasó una semana y entonces fue el turno de mi hermana… a las 9pm recibe una llamada de mi papá y él le dice que yo había ido a visitarlo (yo no había ido ese día) y que al irme había cerrado el portón con candado y lo había dejado a él encerrado afuera de su casa.
Ella se vistió, se montó a toda prisa en el carro y cuando llegó a la casa, él estaba sentado en el balcón muy tranquilo y le dice a ella: “hey, que tú haces por ahí, saliste de trabajar?” Ella, frustrada, le dice: “¡Papi, tú me llamaste, me dijiste que Mari te había dejado encerrado fuera de la casa!” El se ríe y le dice: “Mari no ha venido para acá”
¡Ninguna de las dos había oído hablar del sundowning o síndrome del ocaso y el Alzheimer!
Resulta que en los envejecientes, especialmente los pacientes con Alzheimer, se deja de producir la hormona melatonina que es la que se produce en la noche para “decirnos” que debemos dormir y según se acerca la mañana también nos “dice” cuando despertar.
Es debido a esto que al acercarse la hora de dormir, estos pacientes se muestran con agitación y ansiedad, se ponen habladores y deambulan. Durante el sundowning o síndrome del ocaso es común que el paciente se muestre agresivo, alterado y que tenga alucinaciones (visuales o auditivas).
Es todo esto, la falta de melatonina, la ansiedad, la alteración en el ritmo circadiano, la agresividad, alucinaciones, la inquietud, la deambulación lo que convierte las horas de la noche en horas de pesadilla para los cuidadores.
Lidiar con este problema, requiere mucho análisis, prueba y error y comunicación entre el cuidador y el médico del paciente con Alzheimer.
Encontrar un protocolo que funcione y calme al paciente, lo haga conciliar el sueño y a la vez permitir que el cuidador descanse es la solución a la mayor fuente del estrés en el cuidador.
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